Un exitoso Taller de Intercambio de Buenas Prácticas para la Administración de Equipamientos Comunitarios realizó el Programa Quiero mi Barrio junto a vecinos y representantes de municipios de 18 barrios de la Región Metropolitana. En la actividad, desarrollada en el Palacio Álamos, tuvieron la posibilidad de conversar acerca de experiencias exitosas, aclarar dudas y transmitir sus expectativas.

Las exposiciones estuvieron a cargo de cinco iniciativas, con administración comunitaria, municipal y mixta. Representantes de cada uno de estos barrios mostraron sus experiencias a través de un video y una presentación, enfatizando las estrategias exitosas y los mayores desafíos que enfrentaron a la hora de administrar los equipamientos abordados en la ejecución del Programa Quiero mi Barrio.

La Fundación Futuros para el Tenis del Barrio Santa Adriana de Lo Espejo, dio el puntapié inicial. Richard Quintana, vecino y fundador de la iniciativa que ha acercado este deporte a los niños y jóvenes del sector, narró las estrategias para la administración comunitaria de este exitoso proyecto y cómo han conseguido atraer fondos públicos y privados.

Luego fue el turno de los equipamientos deportivos del barrio Valle de Azapa de Renca, donde explicaron el funcionamiento de un espacio que está en manos del municipio y que ha ido sumando alianzas y ofertas para los vecinos.

Desde el barrio Varas Mena de San Joaquín, en tanto, relataron la experiencia de administración mixta – comunitaria y municipal – de una renombrada cancha de fútbol con pasto sintético y calidad profesional, que le cambió la cara a la tradicional práctica de este deporte en el barrio, que antiguamente se realizaba en una cancha de tierra y sin las condiciones adecuadas.

La administración, por parte de los vecinos de la Sede Comunitaria del Barrio El Polígono de Quinta Normal desarrolló la iniciativa de exponer cómo han logrado mantener activo este recinto, con fiestas, malones, eventos comunitarios, pero, sobre todo, cómo lograron instalar una biblioteca de gran nivel e involucrar a todo el barrio en el uso y cuidado del lugar.

Y, finalmente, desde el Parque Juan Pablo II del barrio La Cañamera de Puente Alto, cuya administración está en manos de la municipalidad, contaron la experiencia de convertir un basural en un parque de más de trece hectáreas que presta diversos servicios a la comunidad, además de ser el área verde más importante del sector de Bajos de Mena.

David Repetti, encargado de Deportes de la Municipalidad de Renca, quien expuso sobre los desafíos de administración del equipamiento deportivo en Valle de Azapa, señaló que “fue súper positivo porque nos dimos cuenta que la experiencia que relatamos es un insumo importante para los otros los proyectos que aún están en construcción, y eso se nota, y es gratificante contar nuestra experiencia y darles una herramienta a las personas que están con sus nuevos proyectos”.

Tras las presentaciones, se realizó un taller con metodología participativa, donde los asistentes pudieron compartir y atesorar las experiencias que consideran replicables en sus barrios.
“Vinimos al taller para alimentarnos del conocimiento y comenzar de otra manera, con algo más avanzado, con herramientas que se pueden utilizar más a futuro. Fue muy útil tomar ideas de otras juntas de vecinos, nos ayuda a nosotros a implementarlas en la nuestra, todos tenemos un buen ejemplo dentro de nuestros barrios que nosotros podemos rescatar”, señaló Edith Venegas, la presidenta de la Junta de Vecinos de El Vivero de Maipú.

Por su parte, Karina Ganga, coordinadora el PQMB en la comuna de El Bosque, donde cuentan con equipamientos que ya están funcionando y otros que están en proceso de construcción, afirmó que “ha sido una jornada súper enriquecedora porque ha permitido tener el espacio para poder manifestar cuáles son las prácticas que más les han resultado a los barrios que ya están en proceso de administración y las dudas de aquellos barrios que están prontos a administrar. Veo a los vecinos bastante motivados con poder compartir y con poder manifestar cuáles son sus temores y sus esperanzas”.

Este taller se enmarca dentro de las iniciativas de traspaso de experiencias y metodologías que realiza el Programa Quiero mi Barrio de la Región Metropolitana. A partir de esta jornada, se llevará adelante un proceso de seguimiento y asesoría en terreno para incorporar las recomendaciones surgidas en la actividad en la administración de los equipamientos comunitarios.